Me voy, pero volveré a irme
Irse es un motivo para tener un sitio al que regresar. Un lugar decente al que volver una y otra vez. Sin cántaro ni fuente. Volver es un punto de partida, una odisea con tintes clásicos, una forma de disfrutar, de vivir el camino. Todos los que volvemos alguna vez a un sitio o a…